Tan rápido como una ráfaga de aire frío se terminó...
y fue justo cuando ambos empezamos a darnos cuenta de que esto no era infinito, aunque caímos en el error de creerlo al principio.
Aquella tarde hacía frío, y creo que no sobró absolutamente nada,
se que me entiendes... pero aquel momento era necesario para darnos cuenta de que no duraría tanto como parecía en un principio... me hubiera gustado, sí... pero no podemos engañar al destino.
¿Qué decir...? tan solo que no eramos el uno para el otro, pero había que darse cuenta cielo, había que intentarlo de un modo u otro.
Y ahora que creo, he despertado, vuelvo y reacciono dudoso y pienso... ¿Enserio?.
A mis oídos llegan frases que dicen que todo te va mejor, ¿Es cierto? lo único que se con certeza es que ahora todo así está bien, creo..., y no se si es por que es verdad que me alegro.
Lo confirman los hechos que lo que no tuvo que acabar y terminó quizás sea porque jamás tuvo que ir a más... y ambos pensamos, que antes era mejor.
Libre vuelvo a intentar ascender a donde pertenezco, y a retomar los pasos donde los dejé aquel momento, vuelve el piano a sonar, y el saxofón le acompaña sin dudarlo... el ambiente vuelve solitario pero no por ello triste, no...,solo guarda el misterio de no saber que me deparará el futuro.
Ahora cambian los valores, las tornas, vuelven los ojos a mirar al horizonte sin saber donde estás, y la seguridad vuelve en pequeños pasos, allí vuelve... lentamente desde la distancia.
Solo pienso, sea lo que sea, donde sea, aquello que perdimos como amantes, que vuelva como amistad.
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