Aún no te has ido, y ya anhelo tu regreso.

Sensación de tenerlo todo y encontrarte en el máximo momento, en el lugar ideal, en el momento oportuno... y a su vez saber que existe, que es real.

Al principio todo eran dudas, sueños extraños que evocaban momentos que parecían irreales, sensaciones que aparecían en mitad de la noche sin venir a cuento, haciendo que los impulsos fueran tan intensos que no pudieran ser controlados.

Al día siguiente, al despertar un poco antes de lo normal, te dabas cuenta que todo estaba pasando de verdad... Poco a poco te dabas cuenta de que quizás... aquello era una enfermedad, un virus había entrado en tu mente y estaba ocupando todas las sinapsis con su voz, su imagen, su figura, su postura, su todo... 2 segundos rozando sus manos fueron suficientes para contagiarme.

Y contigo... aquí, junto a ti... solo puedo decir... "Aún no te has ido, y ya anhelo tu regreso"